lunes, 16 de diciembre de 2019

Declaración de la SLCS con ocasión de la Cumbre Mundial del Cambio Climático


Sin suelo fértil sobre La Tierra, no habrá plantas que en respuesta a la luz solar realicen la indispensable captura de carbono a través de la fotosíntesis. Alcanzar los Objetivos del Desarrollo Sostenible y cumplir con las metas de la Agenda hacia los años 30 y 50, así como detener el incremento de la temperatura del planeta dependen de las posibilidades reales de disminución de
las emisiones de CO2 a la atmósfera, y en ello, el suelo es no sólo uno de los tres reservorios fundamentales para lograrlo, sino el recurso indispensable para desencadenar el indispensable proceso de descarbonización, y por ello, elemento indispensable para el control del cambio climático.

Por ello, desde la Sociedad Latinoamericana de la Ciencia del Suelo (SLCS) hacemos un llamado a los participantes de la Cumbre Mundial del Cambio Climático a realizarse en Madrid durante el presente año, a estratégicamente sumarse a los esfuerzos de la “Alianza Mundial por el Suelo” (FAO, 2012 y ONU, 2013), y la “Década Internacional del Suelo 2015-2024” de la International Union of Soil Sciences (Horn, 2015); pues sin suelo fértil sobre La Tierra, no habrá plantas ni animales que comer, agua que beber, ni oxígeno que respirar: no habrá vida ni desarrollo que alcanzar o sostener (Reyes-Sánchez, 2015).

Llamamos a la comunidad científica a reflexionar sobre la necesidad imperiosa de pensar y trabajar interdisciplinarmente desde todas las áreas del pensamiento para garantizar la existencia de vida futura en La Tierra, pues perder el suelo fértil significa también la pérdida de los organismos del suelo que secuestran el carbono y hacen de este recurso natural uno de esos tres  mayores  compartimentos con capacidad real de captura de CO2 y con ello, una gravísima pérdida de biodiversidad, por lo que no habría forma real de descarbonizar el planeta para lograr el deseado mitigar cambio climático. 

Desde la SLCS les manifestamos nuestra voluntad de trabajar juntos por la preservación de los recursos naturales y dejar atrás toda división de las ciencias, pues el logro de todos y cada uno de los Objetivos del Desarrollo implica trabajar sin fronteras desde el pensamiento científico esclarecedor de quien comprende que en ello no sólo nos va la vida sino igualmente el poder reconocernos en nuestra humanidad.

Hablar, escribir y hacer declaraciones sobre el logro de los Objetivos del Desarrollo Sostenible resulta inútil si no se trabaja para alcanzarlos, y pretender lograr uno en detrimento del otro es avanzar hacia la insostenibilidad, pues el logro real de uno de esos objetivos depende de todos los demás.

Por todo ello, invitamos a los participantes de la COP-25 a compartir nuestras visiones y considerar la inclusión de la preservación del recurso suelo en su Agenda como parte indispensable del equilibrio planetario que hace posible la existencia de la vida como hoy la conocemos, y a trabajar juntos para
preservarla.

Santa Cruz de la Sierra-Bolivia, 28 de noviembre de 2019


IX Simposio Nacional sobre control de la degradación y recuperación de suelos


jueves, 12 de diciembre de 2019

lunes, 21 de octubre de 2019

Implantación de especies forestales (nuevo libro)

En este libro se explican de forma clara y práctica todos los aspectos relacionados con las repoblaciones forestales. Se abordan las diferentes fases del diseño y ejecución de una repoblación, como son: la elección de las especies, el material forestal de reproducción a utilizar, los tratamientos a la vegetación preexistente, las técnicas de preparación del suelo, y la implantación, así como los cuidados complementarios y posteriores. Se presta una especial atención a las peculiaridades de la repoblación forestal en cuencas y laderas erosionadas, así como en zonas secas.

Como en todos los módulos formativos, se presenta la normativa básica a nivel europeo, nacional y autonómico relacionada con las repoblaciones forestales. Así mismo, se indica la normativa de prevención de riesgos laborales y salud laboral en este tipo de actividades.

Este libro pretende preparar a los profesionales forestales para que adquieran las competencias profesionales necesarias para el desarrollo de su trabajo. Asimismo, se trata de transmitir a cualquier lector la necesidad de afrontar, de forma adecuada técnicamente, la repoblación forestal de terrenos desarbolados, especialmente en cuencas y laderas erosionadas y en zonas áridas con riesgo de desertificación.

Implantación de especies forestales (UF0699) forma parte del Módulo Formativo MF0728_3: Gestión de la repoblación forestal y corrección hidrológico-forestal, incluido en el Certificado de Profesionalidad AGAR0109: Gestión de repoblaciones forestales y de tratamientos selvícolas, cuyo contenido está adaptado al Real Decreto 682/2011, de 13 de mayo, modificado por el RD 627/2013, de 2 de agosto, que regula los Certificados de Profesionalidad en la familia Agraria.


Enlace para más información y compra: http://bit.ly/2OAxaY3

Los ingenieros de montes (vídeo)

viernes, 20 de septiembre de 2019

Cuatro comentarios sobre los incendios

Este verano está siendo complicado. Estamos observando meteorologías atípicas en nuestras latitudes. Nos está tocando aprender a marchas forzadas el nombre y funcionamiento de estos fenómenos y su relación con la detección y extinción de incendios.

No hay hashtags, no hay fotos, no hay noticias, ni apenas reconocimiento alguno para ellos, son invisibles, pero en cada provincia de España cada día los compañeros se están enfrentando a la dirección de estas situaciones de manera anónima, salvando vidas, bienes, y nuestros montes. Todo ello sabiendo que el trabajo de decenas de años está en riesgo y en ocasiones se va al garete.

Y cuando estas en un lío de estos y ves la desgracia que es, dedicas unos segundos y recuerdas en silencio la labor de los compañeros y de toda la profesión, muchos de ellos criando malvas, y de los que no sabes ni su nombre, aquellos que trabajaron en la gestión forestal sostenible del monte, cuando estas palabras no existían aún, haciendo deslindes, restauraciones, ordenaciones y tratamientos selvícolas y les das las gracias. También recuerdas con gratitud el trabajo que hicieron con nosotros en la universidad y sólo puedes dar en silencio las gracias a tus profesores. Por último, te giras alrededor buscando un ambientalista defensor de la no intervención para que vea lo mismo que tú, pero esos nunca están. Después rompes esos segundos de silencio, tu mirada ha cambiado, y continuas con el incendio trabajando para que nadie muera, pierda su casa y que todo el mundo vuelva sano y salvo a su casa. Cuando llegue el invierno nadie recordará salvo nosotros y aquellos que sufrieron la desgracia….

Incendio de mina Ponderosa, un año después

Ganará el discurso populista sobre el técnico y el científico (teniendo en cuenta el científico como aquel que no se vende a las modas imperantes y busca la verdad). No interesa la verdad, porque normalmente exige sacrificios y gastos que no se quieren asumir.

Los ingenieros de montes seguimos, desgraciadamente, como a mediados del siglo XIX. Seguimos intentando mostrar a la sociedad la importancia y necesidad de los bosques. Pero en las ciudades no hacen falta en el día a día. Tampoco hacen falta en el medio rural, porque en 10 años no habrá nadie viviendo en los pueblos de montaña. Para la sociedad española el bosque es un decorado donde ir a pasear el fin de semana y/o coger unas setas. Para el naturalista, ecologista un montón de pinos alóctonos y eucaliptos con los que acabar.

Si los políticos no entienden de su papel necesidad, a una escala que multiplica por 20 veces su periodo de mandato, es muy difícil mantener una estrategia y política forestal. Como siempre, a excepción del régimen franquista (y no es porque defienda este régimen), estamos solos. Somos pocos porque pocas personas eligen trabajar por una causa malentendida, mal pagada y que no ofrece ningún prestigio social. Somos pocos porque quien ama los bosques, es filántropo, solidario, humanista, naturalista, generoso, filósofo, ambientalista, trascendente, ecológico, moral, comprometido, humilde, previsor, austero, ... Cualidades que no abundan en muchos otros gremios en los que solo se busca multiplicar el pecunio, la fama o la gloria. La historia forestal es desconocida para el público y repleta de héroes anónimos que trabajaron con fe, tesón y enormes dificultades para dejar de lado el desierto, proteger los pueblos de torrentes, dunas volantes y avalanchas de nieve o lodo y tierra, y que entregaron su salud y su vida al noble ideal de recuperar para la sociedad el bosque perdido.

Pero no tenemos que ser derrotistas, sino hinchar el pecho, coger aire, estar orgullosos de lo que somos, de nuestros antecesores, de nuestros compañeros y de nuestra misión. Tenemos una hermosa y admirable profesión. Y hay que seguir luchando, cada uno en su puesto, para continuar está labor que, como el desarrollo de un bosque, exige décadas, incluso siglos. No hay más necio que el inculto y el que no quiere saber. Nosotros sabemos, sabemos hacer, y seguiremos haciendo y trabajando. Ánimo, ánimo y ánimo. Que el fuego y la incompetencia política y ecopelmaza (como suele decir Juan Andrés) no causen desilusión y desfallecimiento.
Un abrazo a tod@s porque yo estoy orgulloso de tod@s vosotr@s y de nuestr@s compañer@s. Es un honor pertenecer a este colectivo donde no puede estar cualquiera.

Joaquín Navarro Hevia

miércoles, 18 de septiembre de 2019

Video: Saldaña, restauración del Carrión

Extraordinario documental de la serie El Bosque Protector (dirigida por nuestro compañero Luis García Esteban), dedicado a ala restauración de la cuenca del río Carrión en Palencia. Interviene nuestro compañero y amigo Joaquín Navarro Hevia.

VER VÍDEO


martes, 17 de septiembre de 2019

Restauración forestal después de los incendios

España es el segundo país del Mediterráneo con más incendios forestales cada año con 12.000 siniestros y cerca de 100.000 hectáreas de media calcinadas, según el informe Arde el Mediterráneo presentado por WWF. En él, se analizan los incendios forestales en España, Grecia, Italia, Turquía y Portugal, éste último encabeza la media anual de incendios de la última década. En el período 2009-2018, España registró un 23% del total de siniestros en los países mediterráneos mientras que la superficie quemada en este territorio ascendió al 26% del total. Esto obliga a estudiar la política forestal en nuestro país.

Esta situación provoca una “desgracia social, económica y medioambiental que implica la pérdida de riqueza en el medio rural, la destrucción de ecosistemas de gran valor ecológico y en ocasiones hasta la pérdida de vidas humanas”, como explica Jorge Mongil, profesor de la Universidad Católica de Ávila (UCAV), doctor Ingeniero de Montes y profesor de Hidrología y Restauración Hidrológico-Forestal.

Por ello, “es necesario cambiar las políticas forestales, mejorando en prevención frente a los incendios forestales. Pero la prevención pasa por una adecuada gestión forestal, en todos sus aspectos, y el incremento de las inversiones en los bosques”. Además, la política forestal debe estar muy ligada con el desarrollo rural y la lucha contra la despoblación, puesto que en el abandono del medio rural hay que buscar muchas de las causas de los incendios forestales.

Los incendios forestales son un fenómeno recurrente de todos los veranos, intrínseco a la zona mediterránea y muy unido a la actividad humana. Los cambios socioeconómicos en el medio rural han favorecido la existencia de biomasa forestal, combustible en definitiva, lo que unido a condiciones ambientales adversas como periodos prolongados de sequía, periodos de elevadas temperaturas, baja humedad atmosférica y, ocasionalmente, vientos fuertes, hace que incendios a veces muy virulentos se multipliquen en nuestra provincia.

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el 96% de los incendios tienen origen antrópico, ya sean provocados de forma intencionada o causados por negligencias y accidentes. En el 4% restante se incluyen causas naturales, fundamentalmente los rayos, como el que parece ser que provocó el incendio de Sotillo de la Adrada (Ávila) en el mes de julio, y que afectó a la Reserva Nacional del Valle de Iruelas (Ávila).


Después del incendio, el bosque quemado aparece con un aspecto desolador. Las cenizas cubren el suelo y los esqueletos de árboles quemados componen un paisaje en el que la vida parece haber sido eliminada. Es cierto, que tras el incendio hay especies vegetales que son capaces de rebrotar o germinar, es decir, se ven favorecidas por el incendio. Aunque esto puede ser aprovechado en el proceso de restauración del ecosistema, lo cierto es que muchas de estas especies, fundamentalmente de matorral, como el piorno o las jaras, colonizan todo el espacio y hacen prácticamente imposible la recuperación de la cubierta forestal con especies arbóreas.

Después del incendio, las actuaciones pueden clasificarse en dos momentos:

A corto plazo, durante el primer año y a ser posible antes del otoño-invierno es necesario poner en marcha actuaciones de emergencia post-incendio. Los objetivos de estas son:
Frenar la degradación del suelo y reducir las pérdidas de suelo por erosión y el arrastre de cenizas.
Favorecer la rápida recuperación de las áreas quemadas
Evitar daños indirectos del incendio a cursos y masas de agua
No dañar áreas periféricas no quemadas, que pueden servir de reservorios de biodiversidad (fauna y flora) que ayuden a la recuperación de las zonas quemadas.

Entre las actuaciones posibles, están la creación de una cubierta de paja o ramas en zonas de fuertes pendientes, la construcción en las laderas empalizadas con restos de madera quemada, así como albarradas del mismo material en los pequeños cauces y barrancos, con la intención de retener sedimentos y cenizas para evitar su llegada a los cauces principales y embalses, lo que perjudicaría gravemente a la calidad del agua. Esto último se llevó a cabo, por ejemplo, en el gran incendio de la Sierra de Gredos de 2009, con buenos resultados.


A medio plazo, en un horizonte temporal de unos 5 años, debe abordarse la restauración de la cubierta forestal. Esta fase requiere de una planificación adecuada, así como una notable inversión por parte de la Administración y/o de los propietarios de los montes quemados. Dentro de las actuaciones de restauración de la cubierta forestal suele ser necesario la eliminación parcial o total del matorral que ha podido cubrir el área calcinada, debido a que este compite (por el especio, la luz, el agua y los nutrientes) con los pequeños árboles que serán implantados.

Después de una adecuada preparación del suelo, necesaria en la mayoría de los casos, se aborda la implantación de árboles. Para ello es necesario elegir bien las especies, conjugando el que sean especies autóctonas de la zona y que tengan un carácter pionero con el fin de que puedan sobrevivir y desarrollarse en condiciones ambientales adversas de suelos degradados, falta de agua y nutrientes o abundante luz. No todas las especies son adecuadas para este cometido en un primer momento. Por eso, normalmente las repoblaciones tras un incendio se hacen mayoritariamente con especies de pinos autóctonas (en la provincia de Ávila: pino negral, pino piñonero, pino cascalbo o pudio y pino silvestre o albar) y en menor proporción especies de frondosas como encina, roble, castaño, cerezo, fresno, etc. La implantación suele hacerse mediante plantación de arbolitos de uno o dos años procedentes de un vivero forestal, aunque en ocasiones, en la Sierra de Gredos se han realizado siembras con buenos resultados, como por ejemplo en las áreas quemadas en el incendio de Pedro Bernardo del año 2000.

También es necesario actuar en la mejora de las infraestructuras del monte que resultaran dañadas durante el incendio o la extinción: caminos, cortafuegos, depósitos de agua, etc.

Pero aquí no termina la historia. Si la restauración forestal tiene éxito, al cabo de los años nos encontraremos con una masa forestal joven que requerirá cuidados selvícolas como clareos, claras y podas, que favorecen su desarrollo, además de reducir el riesgo de que se produzcan nuevos incendios forestales al reducir la continuidad horizontal y vertical del combustible.

Diario de Ávila

viernes, 14 de junio de 2019

Elección de las especies en repoblaciones forestales: el método de las especies históricas

La elección de las especies es una decisión fundamental en cualquier proyecto de repoblación forestal. Los métodos más habituales de elección de las especies son:
-Método clásico o método de criba por factores del medio
-Métodos basados en series de vegetación (tablas de Luis Ceballos y tablas de Rivas-Martínez)
-Método de los diagramas bioclimáticos
De todos ellos, el método de criba por factores del medio es el de uso más habitual, fiable y completo. Los demás suelen utilizarse como apoyo a este.

El método de las especies históricas, que ahora se plantea también como apoyo al método clásico, consiste en elegir aquellas especies que poblaban el territorio en tiempos anteriores de mayor naturalidad de la vegetación, es decir, en épocas históricas en las que los ecosistemas forestales no habían sido notablemente degradados.

Para esto se suelen emplear fuentes documentales históricas que recogen relaciones de especies forestales, fundamentalmente el Catastro de Ensenada, de mediados del siglo XVIII. Se trata de un método complementario al de criba de factores del medio.

Algunos listados de especies históricas se pueden consultar en el siguiente enlace: https://bit.ly/2W3VNfL

Los principales inconvenientes de la utilización de este método son:
· No puede darse un listado de especies para todos los pueblos, bien porque en el siglo XVIII no existiera monte en esos pueblos o bien porque no se pueden conocer a ciencia cierta las especies existentes.
· Hay imprecisiones en el nombre de las especies. Por ejemplo, en algunos pueblos se habla de “roble” y no se puede precisar a qué especie se refiere.
· En gran parte de los pueblos las especies son las mismas que las que hay en la actualidad, por lo que no tendría utilidad este método. Sin embargo, lo que sí hace el método es orientarnos acerca de las especies que existían en una época de mayor naturalidad.
· Aunque no aparezca una especie en un determinado pueblo, no significa que no la hubiera, sino que no existe constancia de ello o no lo podemos afirmar con total seguridad.
· Los listados de especies son a nivel de municipio, por lo que en términos municipales de gran variedad ecológica no se puede precisar la ubicación de las especies.
· Posibles cambios climáticos ocurridos desde la época de de la fuente histórica hasta la actualidad pueden variar la distribución y presencia de las especies.



lunes, 11 de marzo de 2019

El suelo y manejo del viñedo

La próxima semana participaremos en el XIV Encuentro Técnico de la Fundación Cultura del Vino. Hablaremos de la conservación del suelo y del agua en viñedos.


Programa y más información

Resultados preliminares del proyecto de Bardenas

El profesor de la Universidad Católica de Ávila Jorge Mongil Manso, participó la semana pasada en la IX Jornadas Técnicas de la Reserva de la Biosfera Bardenas Reales de Navarra. En estas jornadas, celebradas entre el 6 y el 8 de marzo, participaron un buen número de investigadores que desarrollan sus estudios en este importante espacio natural navarro, y en ellas presentaron los avances de sus investigaciones.

En concreto, la UCAV presentó los resultados preliminares del proyecto de investigación titulado “Distribución del microclima y usos del suelo de las Bardenas Reales de Navarra y desarrollo de un sistema de información geográfica (SIG)”, que dirige el mencionado profesor, y en el que intervienen también otros cuatro investigadores de otras universidades e instituciones.

El objetivo del proyecto es poner de manifiesto que los valores microclimáticos no sólo son reflejo de la información recogida por las estaciones meteorológicas, sino que deben ser "corregidos" por las circunstancias geológicas, geomorfológicas y topográficas de cada celda; sólo así se podrán establecer después correlaciones entre la realidad física de cada celda y los resultados de los estudios de flora, fauna o usos humanos. Todo ello facilitará el conocimiento de la organización de los seres vivos en el territorio y su interacción con el medio físico, así como la acción del hombre, sirviendo de soporte para la geolocalización de los trabajos de investigación ya realizados en Bardenas y los que se puedan realizar en el futuro.


miércoles, 6 de marzo de 2019

Jornadas técnicas de Bardenas Reales

En estos días participaremos en las IX Jornadas Técnicas Diculgativas de la Reserva de la Biosfera de Bardenas Reales de Navarra, presentando nuestro proyecto de investigación.



sábado, 12 de enero de 2019

Amigos para siempre

Os presentamos el nuevo libro del profesor Juan Andrés Oria de Rueda, con ilustraciones de Rocío Silva

"Amigos para siempre' incluye una historia entre árboles y hongos del bosque, pero no se queda ahí. Combina la belleza de las ilustraciones con las originales y sorprendentes narraciones de los hongos y su amistad con los árboles y arbustos de los bosques.
Con esta obra los autores pretenden contagiar su ilusión a todas las personas amantes de la naturaleza, desde niños a mayores, de una forma divertida y amena, con historias que asombran y estimulan la curiosidad."


martes, 8 de enero de 2019

Nuevo libro sobre el ingeniero Fernando Baró

El ingeniero de montes Ignacio Pérez-Soba acaba de publicar un libro titulado Fernando Baró Zorrilla (1877-1959) y la renovación de la Ingeniería de Montes en España, y lo ha editado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en su serie “Estudios” (n.º 181).

Se trata de la biografía profesional y científica de Fernando Baró Zorrilla (Granada, 1877-Madrid, 1959), uno de los más prestigiosos e influyentes Ingenieros de Montes españoles de la primera mitad del siglo XX. Extraordinariamente trabajador y polifacético, destacó en campos muy variados, incluyendo el de la hidrología forestal, siendo el autor de los dos primeros textos originales en español sobre corrección de aludes y torrentes.